"El perfeccionista en la cocina no se ocupa de si cocinar es una ciencia o un arte; se conforma con que sea una artesanía, como la carpintería o la soldadura casera. Tampoco es un cocinero competitivo. Le sorprendió descubrir que la jardinería, no obstante su aire de serenidad anterior al pecado original, es ferozmente competitiva y con frecuencia una actividad practicada por los envidiosos, los embusteros y los delincuentes sigilosos. Sin duda hay cocineros competitivos, pero el perfeccionista no pertenece a ese grupo. Se contenta con cocinar alimentos sabrosos y nutritivos; sólo pretende no envenenar a sus amigos; sólo desea ampliar poco a poco su repertorio."
Julian Barnes. El perfeccionista en la cocina.
1 comentario:
Hoy tengo que discrepar con este texto que transcribes. Los profesionales de la cocina están siempre compitiendo. Quizás estos no sean los perfeccionistas a que se refiere el autor. Pero también advierto que los no profesionales que gustan de guisar buscan siempre alabanzas superlativas en quienes degustan sus platos y les encorajina la menor crítica. Siempre hay excepciones, claro está.
Publicar un comentario