domingo, 30 de noviembre de 2008

Rosa cielo.


Estábamos viendo una película en la tele. Después de comer nos gusta bajar la persiana hasta quedar en penumbra y, ella tirada en el sofá y yo en uno de los sillones, dejarnos llevar por las luces, las voces y los movimientos que emanan de la pequeña (apenas diecinueve pulgadas) pantalla. Medio adormiladas porque solemos madrugar, medio vemos medio oímos cualquier cosa que a los programadores se les haya ocurrido para acompañar nuestra media siesta diaria.

Hay un anuncio muy malo en el que aparece alguien al que, para parecer pijo, en vestuario le cuelgan de los hombros un par de jerseys, uno azul y otro rosa, que nos hizo mucha gracia la primera vez que vimos. No porque la tuviera, que no, sino por mi comentario de que le quedaba tan bien el jersey azul cielo como el rosa cielo. 'Rosa cielo' desencadenó una tormenta de carcajadas en meri al pensar que, queriendo hacer una gracieta, me había equivocado. En aquel momento le aseguré que algún día podría demostrarle que ese color existe, y es algo que le gusta recordarme de vez en cuando. Esta tarde -obedeciendo a un impulso- he levantado la persiana y la he hecho asomarse. Lo teníamos delante de nuestros ojos. Rosa cielo en una tarde gloriosamente otoñal para el último día de noviembre.

4 comentarios:

Isabel dijo...

Precioso y encantador post,amiga...
Yo,desde mi ventana, he podido confirmar muchas veces que ese color existe.
El problema es que no todos saben descubrirlo...
Me ha encantado.Un besazo.:-)

indo dijo...

rosa cielo, claro. como el rojo cielo. y el azul noche.
y quien no los conozca... que mire un poquito más hacia arriba, que hay cosas hermosas encima de nuestras cabecillas.

Petrusdom dijo...

Esos colores que se van oscureciendo en los artadeceres de estos días, son colores para sentir por los ojos... tantas cosas...
Saludos cordiales

dudo dijo...

Cielos rosas son bajo los que ocurren las mejores cosas...
Abrazazos, valiente.