Imagen de Kyle T. Webster.Me irrito porque quiero y no quiero, porque hablo y al tiempo callo, porque una parte de mí desea estar aquí y otra allí, porque amo y odio al tiempo, porque apruebo y desapruebo actitudes semejantes, porque ansío y aborrezco, porque vivo y muero, porque aunque me independizo resulto dependiente, porque sin buscar encuentro, porque sueño a pesar de que no duermo, porque abro y cierro puertas en el mismo y contradictorio acto, porque alternativamente gano y me pierdo el respeto, porque río y al momento sollozo, porque me visto de amargura y amargo, porque doy para tomar, porque pregunto y no consigo respuestas, porque me muestro y acecho, porque me escondo y persigo, porque necesitando olvidar recuerdo, porque desatiendo y exijo...
Me irrito porque quiero y no quiero.
Me irrito porque quiero y no quiero.
7 comentarios:
Qué malas son las contradiciones, por dios. Vas a tener que pactar un armisticio contigo misma, me temo. Aunque no sea en todo, en alguna cosita, sí.
Por si te sirve ahí va un abrazo fuerte, de los que lo son tanto, que duelen (y en mi caso no es una hipérbole...)
Venga, va...
Al final lo más recomendable y difícil es vivir en paz con una misma.Excelente texto.
¡Me identifico en tantas cosas con él!.
Te dejo un empujoncito hacia la calma y un fuerte abrazo,amiga.
y si además todo esto lo sufres/padeces con solo intervalos de segundos entre uno y otro.. entonces me identifico al 100%..
a ver si va pasando..
besos
Las contradicciones que tenemos siempre, y que supongo que son la esencia de nuestra evolución, de nuestro día a día. Pero no te irrites. Ya te lo dije un día: el enfado rompe el cuerpo, hace agujeros, fomenta el dolor físico. Pensarás lo que yo pensé cuando me lo dijeron: qué fácil es decirlo y qué difícil aplicarlo.
Besitos
La contradicción me parece que es un estado en el que vivimos todos constantemente.
Me sumo a tu lista de contradicciones.
Hola,
Bienvenida al club !!!!!
Creo que todo ésto es muy normal. Me ha gustado mucho.
Hasta pronto
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